-Golpeados por la pandemia de covid-19 hoy también sufren 200 locatarios la pérdida de su patrimonio y sustento de vida por un incendio que los arrasó
Fotos Mario Romero
El corazón económico de Oaxaca cayó en “terapia intensiva”.
Los fierros retorcidos y apilados daban muestra de la devastación de la que fue víctima la Central de Abasto, que ha cargado por muchos años con el estigma de la violencia, delincuencia e inseguridad.
El fuego, develó su verdadero rostro: el de la solidaridad, trabajo, esfuerzo y unidad de los comerciantes que en menos de 10 horas lo perdieron todo en medio de gritos e impotencia ante un incendio voraz que arrancó de raíz la esperanza y la fe.
Entre cenizas el calzado típico a un costado las herramientas y en los recuerdos más de 20, 30 ó 40 años de trabajo, agonizaba por las llamas que se salieron de control y no por la pandemia en la que nadie creía pero que hoy convive con los más vulnerables.
Llanto y desesperación entre comerciantes
Entre llanto y desesperación algunos comerciantes reprocharon la falta de apoyo por parte del edil Oswaldo García Jarquín a quien reclamaron su falta de interés por dar solución a las afectaciones que desde hace años ha sufrido el centro comercial más importante de Oaxaca.
Laminas calcinadas, ropa artesanal que se redujo a cenizas, algunos vendedores se mostraron su apoyo y se solidarizaron con quienes lo perdieron todo.
José Luis Díaz Cabrera, el presidente del Frente de Comercio Establecido del Mercado de Abasto contabilizó al menos 147 locales devastados por el fuego, en donde no se pudo rescatar absolutamente nada.
“No están solos, los vamos apoyar”, dijo el hombre quien fue uno de los únicos líderes quienes se presentaron la mañana de este día a la zona de devastación.
Entre gritos comerciantes reprochan falta de apoyo de autoridades
A su lado se encontraba Luis Arturo Avalos Díaz Cobarrubias, regidor de Bienes Panteones Servicios Municipales y Comercio en Vía Pública, quien recibió gritos y reproches de los comerciantes.
Expuso que la Fiscalía Estatal realiza los peritajes necesarios para contabilizar de manera formal el número de afectados y así poder recibir sus denuncias.
“El municipio se dará a la tarea para apoyar a los comerciantes”, señaló el regidor a quien se le exigió la aplicación de recursos para las obras que se comprometieron desde hace varios meses como parte del ordenamiento.
A casi un día del siniestro administradora se presenta en la Central de Abasto
“¡No queremos prestamos, queremos apoyos!”, exigían los comerciantes quienes pidieron la renuncia de Noemí Alavés Aquino, administradora de la Central de Abasto, quien después de más de 18 horas arribó a la zona.
Después de las inconformidades, las y los vendedores arribaron hasta la administración en donde entre llantos, gritos y demás reprocharon a su administradora, quien arribó 30 minutos tarde de la hora acordada, su falta de sensibilidad.
Las pipas no las dieron gratis, ya los sindicatos han llegado a cobrarlas, dijo una de las locatarias quien aseguró que perdió todos sus productos artesanales.
No hay apoyos, nos han abandonado, agregó mientras la funcionaria agachaba la cabeza, sin mayores argumentos.
Trabajos de soldadura posible origen del incendio
De acuerdo a comerciantes de la zona de artesanías, trabajos de soldadura en una caseta fue probablemente lo que provocó el incendio que afecto a más de 200 locales.
Sin embargo, las autoridades correspondientes no han detectado la causa de la conflagración, que se prolongó por más de seis horas.
Hace unos minutos y después de los bloqueos sobre Periférico, las Casas y Avenida Central , el gobernador Alejandro Murat Hinojosa y Oswaldo García Jarquín, realizaron un recorrido por la zona devastada por el fuego, para conocer sobre la situación que guarda el recinto comercial que abarca más de 15 hectáreas.
Ahí el Gobernador Alejandro Murat les reiteró su respaldo a los comerciantes afectados y anunció un apoyo extraordinario de 100 millones de pesos para reactivar su economía.
La Central de Abasto también tiene ocho zonas comerciales, en donde según estimaciones de los propios locatarios fue afectada el 20 por ciento del total del lugar. En un día de actividad normal obtiene 25 millones de pesos de derrama económica.
La zona de la Central de Abasto fue considerada hace unos días como zona de alto riesgo de contagio por Covid 19 debido a que el municipio de Oaxaca de Juarez reportó la muerte de al menos dos elementos policíacos quienes realizaban rondines de seguridad en este lugar, por lo que se ordenó el cierre del 60 por ciento del lugar.
A la fecha Oaxaca ha contabilizado mil 144 casos de Covid-19 y 122 decesos por este virus.