La disputa por el control del Partido de Movimiento de Regeneración Nacional entre Alfonso Ramírez Cuellar y Yeidckol Polevnsky ha sacado lo más rancio de los morenos en materia de corrupción.
Sin duda alguna para las elecciones intermedias del próximo año (2021), el partido Movimiento de Regeneración Nacional enfrentará un proceso electoral dividido, van confrontados internamente, luego de la fractura entre el dirigente Alfonso Ramírez Cuéllar y su antecesora Yeidckol Polevnsky, quien enfrenta un proceso penal por presunto desfalco de $395 millones de pesos.
El líder nacional de Morena solicitó al mismísimo fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero una investigación exhaustiva del caso, donde, en su momento, se ventiló que la ex dirigente de los morenos en el país, habría pagado facturas por contratos de obras de remodelación y mantenimiento de inmuebles que nunca se llevaron a cabo.
Increíble, los que hablan de transparencia, honestidad, “no robarás”, son los primeros en violar los principios dictados por su presidente Andrés Manuel López Obrador.
¿Habrá cero impunidad en el caso Polevnsky?…Parece que por ahí va el asunto.
En caso de comprobarle el ilícito, por supuesto, debe ser procesada, no es para menos, la señora firmó dos contratos que amparan la cantidad referida y se liquidaron en su totalidad en Año Nuevo y mediante 14 transferencias bancarias desde la cuenta de Egresos de Morena, manejada por el Secretario de Finanzas, Joel Frías.
Las dos compañías beneficiadas son Inmobiliaria Moscati de Querétaro S.A. de C.V., que recibió un pago de 312 millones 445 mil pesos, y Estrada Miranda Proyecto y Construcción S.A. de C.V., a la que se le pagaron 82 millones 555 mil pesos; ambas empresas están ligadas a Grupo Ebor, del queretano Enrique Borbolla García (Animal Político).
Durante la revisión de las finanzas que dejó Polevnsky en el partido, el nuevo Comité Ejecutivo Nacional (CEN) encontró que hubo un daño patrimonial millonario a Morena, debido a que las obras contratadas no se efectuaron, pese a que fueron pagadas de manera anticipada y en su totalidad.
Hasta el momento la FGR no ha emitido ningún avance de las investigaciones, aunque es el presidente López Obrador, el único liderazgo visible e indiscutible del Movimiento de Regeneración Nacional, quien tendrá la última palabra, pero muy poco se ha metido en la lucha que por el control del partido en el poder dirimen sus dos principales figuras: Yeidckol Polevnsky y Alfonso Ramírez Cuéllar.
¡Qué tal con estos morenos!
Lo único que AMLO ha expresado sobre su correligionaria en una de las mañaneras es lo siguiente: “No me corresponde a mi hablar sobre los partidos en cuanto al manejo interno de sus finanzas, pero yo recomendaría que si hay pruebas de irregularidades, de casos probables de corrupción, que se presenten denuncias y que la autoridad competente lo resuelva”.
Si se tratara de otros partidos como el PRI, PAN o Movimiento Ciudadano ya los habría triturado, pero como es Morena, todo se dispensa, se disculpa, aunque esto conlleve a una crisis de liderazgo dentro de su propio partido en el poder y las acusaciones de corrupción entre ambos bandos, suban de tono.
El discurso de AMLO y de la 4T de acabar con la corrupción, se ha debilitado, se quedó en eso, en mero discurso y buenas int
enciones, recuerden que “el buen juez por su casa empieza” y al Presidente, aunque está atento al tema de su partido, no ha querido meter las manos, sabedor que las pugnas internas son tan fuertes porque hay mucho en juego.
Si Morena no supera estas diferencias internas, el 2021 le costará mucho conservar el liderazgo en ambas cámaras legislativas, primero en el Congreso Federal y posteriormente en el Senado de la República, porque hay diversas facciones disputándose el control y no tienen, insistimos, un liderazgo sólido y fuerte que meta orden, van a terminar desgarrándose.
En los estados como Oaxaca, donde también carecen de un liderazgo, recordemos que la pelea interna es entre el grupo del senador Salomón Jara Cruz, quien a toda costa también se quiere apropiar del partido y la delegada de Bienestar, Nancy Ortiz, esta última es la que ningunea las finanzas de Morena en la entidad.
Ahora, Jara Cruz, intenta una nueva jugada para quedarse de una vez por todas con el partido en la entidad y a través de la diputada federal Irma Juan Carlos, ha convocado a sesión extraordinaria del consejo político para este 28 de junio, la cita es en el salón Tanivet del Hotel Los Olivos a las 12:00 horas, sin importarles que Oaxaca sigue en semáforo rojo con altos contagios y decenas de muertos, suman 523 decesos.
No está permitido realizar eventos masivos, eso sería criminal si Morena lo lleva a cabo, todo por cumplirle el capricho a Jara Cruz, que no quiere esperar a que los tiempos de salud mejoren en Oaxaca.
Y los de enfrente, con los que traen pugna, entre ellos Nancy Ortiz y sus diputados locales, están convocando a un boicot de dicho consejo político, porque argumentan que ilegalmente Jara Cruz, en su desesperación, trata de hacer una imposición en la dirigencia de Morena.
Estos morenos son el mejor ejemplo de lo que no se debe hacer en política.
Si no superan sus diferencias en los próximos meses, puesto que el 2021 está a la vuelta de la esquina, le abonan el camino al PAN, PRI, MC, PRD para ir recuperando espacios que perdieron en la pasada contienda electoral, por supuesto van aprovechar que Morena se tambalea y si florecen más las facciones, los morenos estarían en verdaderos aprietos para conservar la mayoría en el Congreso Federal y cámaras locales.
Al tiempo.
EL 1 DE JULIO NINGÚN TRABAJADOR DE GOBIERNO REGRESA A LABORAR
Aunque el Gobierno de Oaxaca emitió un comunicado en donde señala puntualmente que el 1 de julio ningún trabajador regresará a laborar, hasta que el semáforo esté en amarillo, parece que nuevamente hubo confusión entre los empleados de base, que de inmediato protestaron por la filtración que hicieron del nuevo plan de trabajo con la que regresarían a la nueva normalidad.
El nuevo plan laboral que aún está en análisis en las diversas secretarías gubernamentales, incluso ya fue presentado al Gobernador Alejandro Murat Hinojosa, pero no tiene el palomeo final, porque se trata de vidas humanas, las autoridades estatales tienen que revisarlo con lupa, que no se pase ni la más mínima medida de protección, en eso sí tienen que ser extremadamente cuidadosos.
Hay voces dentro del mismo Sindicato de Burócratas que pretenden dividir, aún en tiempos de pandemia, sin importarles que la vida de cientos de sus compañeros y compañeras está en juego, y que ni en julio habría condiciones para un regreso seguro a las labores, la medida será paulatina, gradual, hasta que cambie el semáforo rojo al amarillo y tengan el visto bueno del mandamás subsecretario de salud, Hugo López Gatell.
Por lo pronto, la decisión de Gobierno es que el 1 de julio no hay regreso a laborar. Es mejor que no se hagan bolas.
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