¿Ustedes han visto o conocen que el Gobierno de Oaxaca haya aplicado un sistema novedoso de innovación digital en la administración pública para beneficio de la ciudadanía?
Ahí les va estimadas y estimados ciberlectores.
El 5 de diciembre del 2017, la Secretaría de Finanzas cuyo titular era el “yupi” Jorge Gallardo Casas y el actual director general de Tecnologías e Innovación Digital, Eduardo José Herrerías López otorgaron una licitación pública LPE-SA-SF-0027-11/2017 por un monto de $24,750,000.00 pesos a una empresa que no cuenta con la infraestructura ni sistema innovador para desarrollar un proyecto de tal magnitud.
La empresa a la que beneficiaron es Equipos Digitales de Oaxaca S.A. de C.V., la que se dedica al arreglo de computadoras y en Oaxaca no existe una empresa que tenga un sistema desarrollador innovador de software, por lo visto fue un proyecto sin sustento el autorizado por SEFIN que hasta hoy se desconoce en qué ha beneficiado a la administración pública estatal y más aún, a la ciudadanía.
Valdría la pena que el actual secretario de Finanzas, Vicente Mendoza Tellez Girón, así con esa dureza con la que trata a las y los funcionarios públicos, a los que mantiene ahorcados, con el pretexto de que se cayó la recaudación y la lana se va para la covid-19, las dependencias no tienen ni para comprar papelería, también se echara un clavado fiscalizando cuáles son los sistemas “milagrosos” inventados por su director Herrerías López, porque por lo visto es todo un fiasco.
La duda es ¿cómo una empresa que repara computadoras pudo elaborar un proyecto de tal magnitud, si no tiene infraestructura?…¿Y cómo Herrerías López dictaminó que ésta contaba con la capacidad para innovar toda la administración pública?…¿Y cuál es ese sistema digital tan maravilloso que hizo?, porque hasta hoy no se ve un beneficio real al ciudadano.
En Oaxaca no tenemos fibra óptica, carece el Gobierno estatal de un sistema de infraestructura informática que permita brindarle atención oportuna a la ciudadana, esa es una realidad, por eso las dudas y el cuestionamiento hacia licitaciones únicas otorgadas a empresas que no cumplen con los requisitos, porque esos recursos sí le duelen a Oaxaca y le faltan al Estado.
Por ejemplo, la administración pública en Oaxaca tampoco cuenta con un sistema informático que le permita administrar sus recursos humanos, financieros, contables, productivos, logísticos y más, las principales empresas del mundo utilizan el llamado SAP que proporciona productos y servicios de software para solucionar problemas en las empresas que surgen del entorno competitivo mundial, los desarrollos de estrategias de satisfacción al cliente.
Así como las necesidades de innovación tecnológica, procesos de calidad y mejoras continuas, además el cumplimiento de normatividad legal impuesta por las instituciones gubernamentales, refiere la información sobre este innovador sistema llamado SAP, que pareciera es muy costoso, pero resulta que el costo por implementarlo es de $100,000 dólares, es decir, en pesos mexicanos no llega ni a $3,000,000.00 de pesos.
Y aquí en Oaxaca se gastaron $24,750,000.00 en un supuesto sistema “milagro” para eficientar la administración pública estatal, y hasta el momento se desconocen cuáles son los beneficios reales que ha dejado.
De verdad, es un crimen seguir tirando el dinero de las y los oaxaqueños a la basura, y más aún en sistemas “milagrosos” que no le han dejado ningún resultado a la administración pública estatal y menos a la ciudadanía.
REGRESO A CLASES, EL OTRO ESCENARIO CATASTRÓFICO
Si bien es cierto que la pandemia de la covid-19 vino a cambiarnos completamente la vida y que cada quien tiene que asumir su responsabilidad en el autocuidado porque la estrategia sanitaria del súper subsecretario Hugo López Gatell es catastrófica con 60,480 muertos y 560,164 casos acumulados positivos hasta anoche, el inicio del nuevo ciclo escolar a distancia 2020-2021, parece que también podría fracasar.
Y como un ejemplo está Oaxaca con sus 570 municipios y más de 3 mil 500 localidades, en muchas de ellas no llega la señal de televisión, que en este caso será la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión (CORTV), la responsable de hacer las trasmisiones de las clases acorde al nivel educativo.
De acuerdo al INEGI, en Oaxaca el 28.3 por ciento de las viviendas en la entidad no cuentan con televisión y el 38.7 por ciento no tienen radio, y tampoco computadoras, entonces, ¿cómo le van hacer las y los alumnos para recibir las clases?…ese escenario en el Estado no lo visualizaron los del IEEPO, de ahí que la aguerrida Sección 22 de la CNTE, se oponga a esta nueva modalidad por las graves afectaciones y deficiencias que traerá a las y los estudiantes.
Para nadie es un secreto el rezago histórico que cientos de núcleos rurales enfrentan no solo en materia educativa, sino también en salud, en vivienda, una pobreza extrema que lastima a miles de niños y niñas, por ello es mega imposible que puedan acceder a las clases en línea cuando sus comunidades no cuentan con las herramientas necesarias para ello, tendrían que adquirirlas y eso cuesta, es un dinero que los padres y madres de familia no tienen.
Sin ser catastróficos como Gatell, pero el nuevo modelo educativo a distancia implementado por la Secretaría de Educación Pública (SEP) y su titular Esteban Moctezuma Barragán no encaja en Oaxaca, tienen que buscar otras alternativas que impidan un trato desigual con las y los niños de las comunidades indígenas que viven en extrema pobreza y que no tienen acceso a un televisor, ni siquiera cuentan con internet satelital.
¡No pensaron en Oaxaca!…¡esa sí es una desgracia!
Y se supone que hay un Gobernador amigo del Presidente.
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