Lo material se puede recuperar, “me comprometo a hacerlo; lo que me preocupa es el resguardo de las personas”, expresa // Supervisa el Presidente obras en Nayarit
La Yesca, Nay., Desde este municipio enclavado en la sierra del Nayar, el presidente, Andrés Manuel López Obrador se abrió espacio para enviar un mensaje a los habitantes de Tabasco afectados por las intensas lluvias y la continuación del desfogue de la presa Peñitas, lo que ha agudizado las inundaciones: “Mi llamado es para que mis paisanos se puedan refugiar en las partes altas del estado” y acudan a los albergues.
Lo material se puede recuperar, “me comprometo a hacerlo, pero lo que me preocupa es la parte de la protección a las personas”. Lamentó que la intensidad de las lluvias haya provocado el fallecimiento de dos personas, por lo que conminó a la gente a acudir a los albergues porque está lloviendo como hace tiempo no sucedía. “Les digo a mis paisanos que tomen precauciones porque lo más importante es la vida”.
Aseveró que se ha desplegado un operativo conjunto con el gobierno del estado encabezado, por la parte federal, por el almirante Rafael Ojeda, secretario de Marina, y la Coordinación Nacional de Protección Civil. Explicó que los municipios más afectados son Cunduacán, Centla, Centro (Villahermosa), Nacajuca y Xalpa de Méndez.
Desfogue impedido
Señaló que las presas de la Comisión Federal de Electricidad no desfogan porque están impedidas de generar energía como consecuencia de la reforma energética, por eso ahora que se tiene el vaso lleno en Peñitas, no hay alternativa.
López Obrador explicó que la, situación se complica porque no se han desazolvado los otros ríos en los que no hay control de presas, donde hay tapones, particularmente en la desembocadura del río Usumacinta. Comentó que si la situación se complica aún más, concluyendo esta gira por Sinaloa y Nayarit acudiría a Tabasco. Por ahora, dijo, “recibo reportes de la situación cada 20 minutos”.
Supervisión de caminos
Después de casi dos horas de dar tumbos por una estrecha y escarpada brecha en plena sierra del Nayar se llega al corazón de las obras que convertirán esta tortuosa terracería en un camino asfaltado. Se comunicará la cabecera municipal de La Yesca –ubicada en esta intrincada región, de comunidades huicholes– con la presa La Yesca, una gigantesca construcción donde comienza la carretera federal y termina la marginación.
Es una obra de particular interés y empeño para López Obrador, dirigida, asentó durante el acto oficial, a los marginados de los beneficios del desarrollo.
Son pocos kilómetros, 37.1, y mucho tiempo empeñado en esta terracería para llegar a la zona donde opera la presa y comienza la carretera.
Hasta acá llegó ayer López Obrador para supervisar los avances de una construcción que lleva apenas 12 kilómetros pero que, indicó, se concluirá en noviembre de 2021, con una inversión global de 270 millones de pesos. A lo largo del camino, se aprecian los trascavos y demás maquinaria, así como las pancartas que agradecen al Presidente “hacernos justicia”. Anuncian el cambio por venir.
Fuente: La Jornada